
Una vecina de Navalcarnero nos llamó para pedir ayuda urgente para un gato que se había metido en el garaje de su edificio y aunque ella le bajaba comida y agua, los demás no le querían allí.
Le recogimos y una compañera le acogió.
Garfield es un gato guapísimo, tranquilo , casero y muy bueno. Todo el que le conocía se enamoraba de él, finalmente fué adoptado por la familia de otra amiga y voluntaria nuestra y es muy feliz con su compañero peludillo.
Nos hicimos cargo de todos sus gastos.