
Recogido por una compañera en pésimo estado en medio de una calle de un polígono industrial
Era la noche de un sábado, por lo que le dijimos que le llevara a un Hospital Veterinario, donde pagamos la factura de 104,42 euros.
Fue acogido en casa de una de nuestras voluntarias, allí este lindo gatito recuperó su salud y sus ganas de vivir.
Trasto, ahora Sudi, ha sido adoptado por una familia maravillosa que le cuidará para siempre.
